Lo peor es que la cifra ha ido creciendo cada año en términos absolutos, pues las cifras, anualmente, van desde los 500 mil hasta los 625 mil –y más- jóvenes, provocando en una década poco mas de 6 millones y medio de alumnos desertores.
Y por primera vez Veracruz no se cuenta entre los primeros lugares de deserción, ya que de acuerdo al estudio, Nuevo León, Distrito Federal, Chihuahua, Morelos, Guanajuato y Coahuila son los Estados donde se registró la mayor tasa de abandono, mientras que Puebla, Chiapas, Tabasco, Veracruz, San Luis Potosí, Guerrero y Tamaulipas tuvieron los índices más bajos de todo el país. Lo curioso es que la deserción en zonas urbanas fue mayor en tres puntos porcentuales a la que registran localidades rurales.
Según la Secretaría de Educación Pública, entre los ciclos escolares 2000 y 2001 se realizaron 39 millones 744 mil 317 inscripciones de alumnos en alguno de los sistemas y niveles del bachillerato, pero en ese mismo periodo se registraron 6 millones 510 mil 487 desertores totales, esto es, 16 por ciento en promedio abandonó la escuela.
El análisis muestra que a lo largo de esos 10 años los “desertores totales” se incrementaron, por año, en términos absolutos, al pasar de 501 mil 520 alumnos en el ciclo 2000-2001 a 624 mil en el periodo 2007-2008. Ya en el ciclo 2008 y 2009 la proporción se redujo hasta 605 mil 567 estudiantes, pero para el ciclo 2010-2011 el abandono retomó su tendencia e hizo que 625 mil 142 alumnos quedaran fuera de la escuela.
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